Millones de ciegos
Caminan como zombies
A sus casas limpias
A sus corazones
Dormidos
La esperanza
Es un destino improbable
Sangra la niña
Tabicada
Como en un corral
El animal que fue
La patria
Se retrae y espera
El golpe en la nuca
Y mi tia esconde
Sus libros de poesia
Y mi padre
Escucha su musica
A oscuras
Y mi abuelo
Occidental y cristiano
Nos detesta solapadamente
Simulando incommensurable
Ternura
Los susurros del barrio
Se multiplican
Y algunos gimen
Su dolor
Como pueden
Otros como yo,
Que poco entienden
De largas noches
Y hombres lobos
En caceria
De maestros amados
Que no vuelven
A clase
Sonrien
Abrazados a sus poemas
Y A la intuicion permanente
De que esto tambien pasara.